Aunque pueda parecer contradictorio, los meses de invierno son el momento más oportuno para exfoliar la piel. Gracias a la caída de las temperaturas, la calefacción interior y la menor humedad en el aire, las células de la piel se secan (y mueren) más rápido y necesitan ser eliminadas para que entren nuevas células. La exfoliación también ayudará a que los sueros, humectantes y lociones penetren. en piel nueva en lugar de asentarse sobre una capa de células muertas. A la hora de elegir un exfoliante, es importante seguir estas reglas de cuidado:
- Consejo 1: No te excedas, ya que puedes irritar tu piel. 2 o 3 veces por semana es suficiente.
- Consejo 2: intenta encontrar un exfoliante que no sea demasiado duro para la piel.
- Consejo 3: Si tienes un #Clarisonic o una herramienta de limpieza automática, eso puede ayudar, pero nuevamente, los movimientos suaves y circulares hacia afuera son los mejores.
